Estrógenos bajo mínimos. ¿Qué supone?
En el artículo anterior os hablaba de lo que tienen en común la fase premenstrual, el postparto y la menopausia: una bajada considerable de estrógenos en nuestro organismo.
Pues bien, ésta es muy normal en determinados momentos de nuestras vidas:
+En la fase premenstrual: si no nos hemos quedado embarazadas, no los necesitamos en tantísima cantidad y, para que empiece otro ciclo menstrual... debe haber una bajada para que siga el proceso de limpieza y reinicio.

+En el postparto: durante el embarazo hay un aumento progresivo de estrógenos para que el útero madure de forma adecuada y asegurar un desarrollo fetal óptimo y saludable. Una vez que tiene lugar el parto, ya no es necesaria tanta cantidad de estrógenos, por lo que cae en picado la concentración de éstos, dedicando más energía a la síntesis de otras hormonas más importantes durante la lactancia y puerperio.

+En la Premenopausia y menopausia: Cuando nos vamos quedando sin reservas de óvulos, nuestro organismo se prepara para bajar el ritmo hormonal y dar prioridad a otras hormonas, pues los estrógenos (uno de los protagonistas en la etapa fértil de nuestra vida) dejan de ser tan importantes.